El 15 de octubre celebramos el Día Internacional de las Mujeres Rurales, con el objetivo de reconocer al papel decisivo de la mujeres en el desarrollo y a la seguridad alimentaria. A pesar de sus roles clave en la agricultura y en los sistemas agroalimentarios, las mujeres y las niñas desventajas diarias como estereotipos de género que no le permiten disponer del mismo acceso a la tierra, créditos, materiales agrícolas, mercados o cadenas de productos cultivados de alto valor. Tampoco disfrutan de un acceso equitativo a servicios públicos, como la educación y la asistencia sanitaria, ni a infraestructuras, como el agua y saneamiento.
Ahora, debido a la pandemia, sus problemas se agrava más aún en las zonas rurales: les es menos probable tener acceso a servicios de salud de calidad, medicamentos esenciales y vacunas. La COVID-19 y el distanciamiento social, además, han tenido un impacto significativo en el aumento de la violencia doméstica y en la prestación de servicios sanitarios, judiciales y policiales esenciales para las mujeres que han sufrido o corren el riesgo de sufrir violencia. La epidemia ha aumentado el riesgo de violencia contra la mujer, ya que si bien la cohabitación y el confinamiento forzosos han agravado las situaciones de violencia preexistentes, la emergencia sanitaria ha reducido drásticamente las posibilidades de que las mujeres soliciten ayuda. De hecho, las mujeres han experimentado numerosas dificultades para pedir ayuda y, por lo tanto, para obtener los servicios esenciales de apoyo, tanto físicamente como a través de las líneas de ayuda (telefónicas y en línea), porque al verse obligadas a permanecer en casa con su agresor no tenían la privacidad necesaria para proceder.
A través de nuestras iniciativas en Cuba y Colombia, contribuimos al aumento de la participación de las mujeres en los procesos de toma de decisión y productivos, el fortalecimiento y la inclusión del enfoque de género en las políticas públicas para el desarrollo rural y el aumento de las oportunidades de empleo para las mujeres rurales, promoviendo los derechos de las mujeres y la igualdad de género.
Quiere ser parte del esfuerzo para un mundo más igual y justo?
Te invitamos a sumarte a la campaña participando al diálogo organizado por Naciones Unidas Colombia, en el que se presentarán experiencias exitosas donde las mujeres indígenas, afrodescendientes y campesinas colombianas mostrarán su potencial y capacidad para transformar y construir un país y un mundo en condiciones de igualdad.
