El pasado mes de diciembre concluyó la iniciativa “Apoyo al Plan Nacional de inclusión social y seguridad alimentaria del PMA” dirigida a contribuir con el trabajo del PMA en el marco del Plan Nacional del Gobierno cubano para el control y la prevención de la anemia.
Con el objetivo de maximizar los resultados, y en coherencia con el proceso de actualización del modelo socio-económico cubano, el PMA apoya a las autoridades nacionales y locales en el en el deseo de alcanzar sistemas de protección social más sostenibles y enfocados. En particular, la acción financiada por el Gobierno italiano, se enmarcaba dentro de la prioridad n. 1 del Country Programme WFP 2015-2018, el cual hacía mayor énfasis en el desarrollo de las capacidades para satisfacer las necesidades alimentarias y nutricionales y favorecer la red de seguridad social vinculada a nutrición y alimentación.
La iniciativa concentró sus actividades sobre todo en las provincias orientales del País (Guantánamo, Santiago de Cuba, Granma, Holguín, Las Tunas) en las que se identificó una persistente y elevada prevalencia de anemia. En particular, a finales de 2015, el Sistema de Vigilancia Alimentaria y Nutricional (SISVAN) indicó que en el Oriente del país el 31,6 % entre los niños de 23 meses y hasta el 39,6% entre los infantes de 6 meses sufren de anemia.
El programa actuó según los objetivos específicos siguientes:
- Identificar problemas nutricionales en grupos vulnerables caracterizados por lagunas informativas: las mujeres en edad reproductiva (adolescentes del sexo femenino, mujeres entre 20 y 44 años) y los adultos mayores, mediante el desarrollo de investigaciones dirigidas a identificar los problemas nutricionales y riesgos más frecuentes en dichos grupos vulnerables;
- Prevenir la carencia de micronutrientes – sobre todo de hierro- en las mujeres embarazadas y madres lactantes, también en los niños menores de 2 años, mediante la distribución de alimentos fortificados y micronutrientes en polvo destinados a estos grupos poblacionales.
Gracias a la contribución del Gobierno italiano equivalente a 500.000 Euros, en los 3 años de implementación de la iniciativa, fue posible lograr los siguientes resultados:
- Cerca de 118.000 niños menores de 2 años recibieron alimentos nutritivos especiales (micronutrientes en polvo – MNP);
- Más de 35.000 mujeres embarazadas y madres lactantes, así como 28.000 adultos mayores recibieron alimentos fortificados (Súper cereal, CSB+)
- Realizadas actividades educativas y de comunicación para lograr cambios en el comportamiento nutricional;
- Ofrecida asistencia técnica para el inicio de la producción local de cereales fortificados en la fábrica de Bayamo.