La agricultura sostenible, la protección del medio ambiente y los sistemas agroalimentarios inclusivos son pilares claves del desarrollo de un territorio. En Cuba, la estrategia de la Cooperación italiana prioriza el apoyo a los pequeños agricultores y sus organizaciones, promoviendo la intensificación sustentable de las prácticas agrícolas, dedicando especial atención a la investigación aplicada y a la divulgación técnica para alcanzar metas productivas más elevadas en términos cuantitativos y cualitativos. Las acciones italianas también priorizan la conexión entre producción y consumo local de alimentos, apoyando la estrategia del autoabastecimiento municipal. Se considera también relevante fomentar la sensibilización y educación alimentaria y nutricional, valorizando el papel clave de las mujeres en la producción agrícola y en la suministración de alimentos y su contribución fundamental a la seguridad alimentaria del hogar. La promoción de la equidad social, con especial atención a las temáticas de género, se vincula al desarrollo integral territorial y por esto representa un elemento clave de la acción italiana en el sector.Las tres áreas priorizadas de trabajo son: